martes, 22 de noviembre de 2011

El fundo del tío Felipe

Mi madre era de Chincha, una pequeña ciudad ubicada a 200 km al sur de Lima, distancia que se hace fácilmente en una hora y media. Mi padre tenía un auto marca Jaguar, auto inglés de color verde y con interior de madera. Era el "Rolls Royce en serie" según mi papá, que estaba orgullosísimo de tener una de máquina de las que había muy pocas en Lima.

Todos los meses, mis padres escogían un fin de semana para visitar a la familia y a los amigos y el sitio de encuentro era el fundo del tío Felipe. Era un fundo de unas 250 hectáreas donde se sembraba algodón, que al momento de la cosecha parecía un manto de nieve.

El mayordomo se llamaba Antonio y era el hombre orquesta pues hacía de todo. Y yo ahí, junto a él siempre. Como cuando ordeñábamos a las vacas. Antonio también hacía la mantequilla y el queso. Nos levantábamos a las 5 am para efectuar todas esas faenas, y conmigo como ayudante, el desayuno estaba listo para las 7:30 am en punto, luego de que pasara el panadero en su burro portando sus sacos de pan calentitos. Siempre le comprábamos dos sacos de pan, que con la leche recién ordeñada, la mantequilla recién hecha y el queso preparado el día anterior era un verdadero manjar de los dioses. Esto hubiera hecho las delicias de mi amigo Renzo.

Después del desayuno, salía yo a la chacra a jugar con los hijos de los peones de la hacienda. Jugábamos a las escondidas entre los matorrales de algodón. También jugábamos a la yunza, sin cansarnos nunca. Montábamos a caballo y escuchábamos las tenebrosas historias de Juan Joya, el joven tractorista que años después fuera famoso jugador de fútbol del Club Alianza Lima y que creo que llegó a pertenecer a la selección peruana. Pero ese dato lo tendría que confirmar mi amigo Esteban Lob, blogger que de fútbol sabe más que las arañas.

Y así pasábamos el día.

Los domingos, Antonio preparaba un cochinillo al palo que devorábamos chicos y grandes, y que regábamos con un vinito que se hacía en la hacienda del costado.

Esta fue una costumbre que se repitió durante años hasta que el tío Felipe vendió el fundo.

Pero ahí no termina la historia. Lo demás es muy penoso, pues quien compró la propiedad era uno de los amigos que frecuentaba las reuniones semanales. Con la Reforma Agraria impuesta por el gobierno militar (1968-1980), surgió un organismo que manejaba el cruel aparato del gobierno militar llamado Sinamos (Sistema Nacional de Movilización Social). Esta entidad mandó rayar las dos pistas de aterrizaje que tenía el fundo para que no pudieran aterrizar las avionetas que arrojaban el arseniato que protegían el algodón de los bichos. En un enfrentamiento muy violento con armas de fuego entre los hacendados y el Sinamos, al nuevo dueño de la hacienda de tío Felipe le cayó un balazo y...

Recuerdos de una niñez feliz que no se irán jamás.

12 comentarios:

  1. Y si a ese provocativo desayuno se le agrega manjarblanco recién hecho, es ambrosía pura.

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  2. De dulce y de agraz, como todo en la vida.... lástima por el dueño de lo que fue del tío Felipe. Qué tristeza, pero también que lindos recuerdos. Esas andanzas con el premio de ese desayunito con todo "al pie de la vaca" suena de maravillas.

    Saludos

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  3. Que bonitos recuerdos. Tu tío Felipe era hermano de tu mamá? Que rico desayuno, y me ha provocado el cochinillo al palo bañado al vino. El Sinamos el terror, fueron años horribles. Qué le pasó al nuevo dueño después del balazo? me imagino que continuará la historia...
    Primacha

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  4. Me gustó la historia. Me encantó.

    Lamento el final pero es una realidad que no viví y todavía no logro entender pues tiene tantos detractores como defensores.

    De todos esos párrafos en los que hablas de la comida superan a cualquiera de mis posts. (Nada como la comida de casa)

    Saludos

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  5. Y se me ha hecho agua la boca leyendo lo de la mantequilla, el queso, y el pan... (lo de la leche, no va mucho conmigo debido a la lactosa), y qué decir del cochinillo al palo.

    Todo tiempo pasado ¿fue mejor? Depende, creo.

    Saludos.

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  6. Y si a la mesa de Gabriela le añadimos un frejol colao para untar a los panes, ¡uf, que nos pasamos!

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  7. Hola Lalo, recuerdo haber ido alguna vez contigo a la hacienda del tio Felipe e inclusive si mal no recuerdo, en una oportunidad recibi accidentalmente, claro esta, un perdigon muy cerca al ojo izquierdo, te acuerdas?
    De otro lado Juan Joya no solo fue integrante de la seleccion peruana, sino idolo del club uruguayo probablemente mas popular de Uruguay, Peñarol, donde inclusive tiene un busto, construido en agradecimiento a la magnifica trayectoria del mas conocido como ONCE EL NEGRO.

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  8. Que rico Gabriela.Aunque me temo que no estaba dentro de las especialidades culinarias de Antonio,pero no te impidas de hacerlo tu y nos envias por correo a cada uno de los "chicos" del blog.

    Asi es, mi muy apreciada AleMama, me gusto mucho eso de "al pie de la vaca".

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  9. Eran primos en segundo grado, Lo que sigue de la historia es nuy penoso y prefiero no recordarlo.
    mi querida primacha.

    Entre tus virtudes se nota claramente la humildad estimado Renzo, en cuanto a comida eres simplemente el mejor. A proposito invto a mis lectores a que hagan click en el nombre Renzo que aparece en mi entrega y le den una lectura al mejor post sobre comida, que personalmente creo que esta para premiarlo

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  10. Estimada Cris: gracias por tu comentario,son recuerdos muy gratos. Que pena el tema de la lactosa. Habia dias en que Antonio me ponia justo bajo la vaca y ordeñaba directo a mi boca, era de otro mundo.

    Pollita querida: no sabia de tan exoticos gustos.
    Ademas con mi diabetes, para mala suerte no podria probarlos.

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  11. Hola Gustavo, bienvenido al blog. Como no acordarme si fui yo el que te disparo mientras sostenias el bull, mismo Guillermo Tell.
    Gracias por el dato de don Juan Joya.

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  12. Primacho, un gran favor, se me han borrado todas las direcciones electrónicas ya que se me malogró la computadora, envíame un correo, para poder guardarla.
    Un abrazo Primacha.

    PS: que pasa que hace tiempo no escribes aquí en tu blog?

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